lunes, 7 de agosto de 2023

MADERA, ÁRBOLES E INFORMACIÓN (y III, ANILLOS de CRECIMIENTO)

    Anillos de crecimiento de: 
-Izquierda, abeto (conífera), la madera de primavera es la parte clara, la línea oscura es el final del crecimiento anual,notese la diferencia de anchura para el mismo ejemplar.
-Centro, quejigo (anillo poroso), la mayor parte de los vasos se concentran en la madera de primavera que parece un poco más clara.
-Derecha, boj (anillo de poro difuso) los vaso se hallan repartidos por todo el anillo y este es mucho mas difícil de diferenciar de los contiguos, incluso se aprecian mejor los radios medulares.

        Ya hemos comentado que los árboles tienen dos tipos de crecimiento, uno primario en altura que se origina desde la yema terminal, y otro secundario en anchura que depende del cambium (entre la corteza y el leño). Este es el crecimiento que nos interesa, pues cada año el árbol tiene que desarrollar los vasos por donde circula la savia, así como las fibras de sostén, etc. durante la época vegetativa, en nuestras latitudes de primavera a otoño, formando así cada año un nuevo anillo de crecimiento.

 

         En las coníferas es donde mejor se ven, la parte ancha y de color más claro es la madera de primavera, contiene la mayor parte de vasos leñosos, la parte oscura y estrecha es la madera tardía y corresponde al final del crecimiento. En algunas frondosas como los robles, la madera de temprana es la parte estrecha y clara, y contiene la mayor parte de los vasos leñosos, la parte oscura es más densa y con menos vasos. Algunas especies como los olivos los vasos están distribuidos por todo el anillo, y en muchos casos no es patente la diferencia entre unos y otros anillos, en especial los que crecen en sitios cálidos.

         La anchura del anillo va a depender de la especie, pero sobre todo del crecimiento dentro de la misma especie incluso en el mismo ejemplar las diferencias de anchura en los añillos pueden ser notables; si las condiciones son buenas y ha habido un buen crecimiento el anillo será ancho. Si el crecimiento ha sido escaso, el anillo será estrecho e incluso puede que no se forme en todo el perímetro, por eso nos referimos a ellos como anillos de crecimiento y no anuales, pues puede haber un año que no exista anillo.

         De esta forma con los anillos de crecimiento, podemos hacernos una idea de la edad real del ejemplar,  y no con las dimensiones del tronco. Y así sabemos que los árboles más viejos de la Península Ibérica superan en poco los mil años y corresponde a solo tres especies de coníferas y en ningún caso son ejemplares de notable tamaño sino lo contrario.

         Con el grosor de los anillos los dendrocronólogos, podrán saber el crecimiento del árbol y deducir las condiciones ambientales en las que crecieron a lo largo de los años. Donde mejor se aprecia es la sección del tronco, pero si el árbol esta vivo, no hay que cortarlo, se obtienen un par de muestras de cada árbol con una barrena especial que saca un testigo de la madera, vamos como cuando a nosotros nos hacen una analítica de sangre. Pero la información de un solo árbol podría estar sesgada, por lo que se buscan cuantos más árboles mejor de la misma especie (suele ser unos 10) en condiciones semejantes de: altitud, orientación.

         Con la anchura de los anillos podremos saber los años de clima adverso (en la zonas mediterráneas son los secos, y en las de alta montaña y taiga son los de veranos fríos), pero además podremos saber si ha sufrido ataques de plagas, perdida de ramas y/o raíces, incluso la competencia con otros árboles; y lo mejor de todo es que con los anillos podemos poner fechas a estos momentos y conocer no solo el clima, sino también eventos como riadas, aludes, incendios,….

La forma de los anillos. 

-Izquierda crecimiento regular en anchura, abeto, los anillos concéntricos que seria lo esperable, se presentan como excéntricos debido al inclinación del tronco, viendo en que momento se produce el cambio, tendremos la fecha de la inclinación, la causa la deduciríamos del entorno.

-Derecha crecimiento irregular, sabina negral, en estas especies sus anillos son siempre irregulares, a veces muy excentricos sin causas aparentes, en este caso actualmente poca información podemos obtener mas allá de la edad.

         Pero no solo nos podemos servir del grosor de los anillos, también de su forma. En las especies de crecimiento en anchura regular, un tronco en posición vertical recibe empujes desde todos lados, por lo que sus anillos son concéntricos, la médula esta en el centro del tronco. Pero en algunos sin embargo los anillos tienen una forma excéntrica, la médula esta desplazada a un lado.  Eso nos indica que hay una dirección de empuje que domina, bien por viento de dirección constate como en la costa o en las crestas de las montañas,; o por estar el tronco inclinado, el árbol forma más madera ahí donde lo necesita como refuerzo, el cambio de forma de anillos de concéntricos a excéntricos nos indicia en que momento se inclino, y la causa la tenemos que deducir por si situación: en la ribera de un río seria por efecto de una riada, en una ladera de alta montaña por el empuje de la nieve, en una pendiente inestable por movimiento del suelo…

         Así, podemos datar eventos de los cuales no tenemos registro escrito, y así saber sus periodos de retorno, cada cuanto se producen, y ayudar en la ordenación del territorio con la prevención de riesgos naturales.


Texto y fotografías: Miguel Ortega